Muy bueno, no tiene nada de grasa. Muy esponjoso y con el punto justo de dulzor. Genial para el desayuno y la merienda
Lo he copiado del blog Cocinando en Marte y lo he adaptado a mi gusto. No hay que dejarse engañar por la foto.
INGREDIENTES
320 gr de harina de repostería
3 huevos (L)
50 gr de azúcar de caña.
4 cucharadas de azúcar invertido (miel, en la receta original)
2 cucharadas de mermelada (de melocotón casera en mi caso)
1 cucharada de aceite
50 gr de arándanos deshidratados
40 gr de nueces sin cáscara a trocitos pequeños
100 ml de café frio.
1 sobre de levadura en polvo
1 cucharada de canela
1/2 cucharada de clavo molido (no le puse)
1/2 cucharada de jengibre en polvo (no le puse)
PREPARACIÓN
Precalentar el horno a 170º
Cortar a trocitos las nueces, mezclar con los arándanos y las dos cucharadas de mermelada, reservar.
Separar las claras de las yemas.
Montar las claras a punto de nieve, reservar.
Batir las yemas con el azúcar hasta que doblen su volumen. Añadir el azúcar invertido, el café y el aceite. Mezclar bien.
Tamizar harina, levadura y canela, en mi caso. El clavo y el jengibre, si se ponen.
Unir la mezcla de yemas y la de harina. Remover. Añadir las nueces, arándanos y mermelada, volver a mezclar.
Poco a poco ir agregando las claras montadas, con movimientos envolventes para no sacar el aire.
Pintar con aceite un molde de plum cake. Siempre pongo una tira de papel de hornear en el fondo, así se saca del molde fenomenal.
Cocer unos 45 minutos. Se puede pinchar con una brocheta. El plum cake estará cuando salga limpia.
Después de 10 minutos desmoldar y dejar enfriar completamente en una rejilla.
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