Me encantan este tipo de masas, aunque no las hago nunca !con lo poco que cuesta¡. Necesito una excusa y siempre llega por estas fechas.
He cambiado de receta. Este año he preparado una del blog Recetas de Rechupete. Han gustado mucho a la familia y amigos. Por primera vez he rellenado de nata los que iban destinados al café y dejé sin rellenar los del desayuno, siempre los habíamos comido tal cual, sin nada dentro.
La masa pierde mucho de un día para otro, pero vamos no ha quedado ni uno y salieron bastantes !que ricos están¡
INGREDIENTES
50 gr de mantequilla
3 huevos (creo que se podrían añadir alguno mas)
300 ml de agua
150 ml de leche entera
45 gr de azúcar ( tres cucharadas)
Un pellizco de sal
300 gr de harina de trigo
10 gr de levadura Royal
Ralladura de naranja (puse de limón)
Aceite de girasol para freír
250 gr de nata de montar para el relleno
2 cucharadas de azúcar
Azúcar para rebozar
PREPARACIÓN
Pesamos y preparamos todos los ingredientes.
Tamizamos la harina, la levadura y las sal. Reservamos.
Ponemos en un cazo a fuego medio la leche, el agua, la mantequilla, la ralladura, el azúcar y la mantequilla. Cuando empiece a hervir retiramos y añadimos la mezcla de harina y levadura, llevamos de nuevo al fuego y removemos muy bien hasta obtener una masa homogénea. Sacamos del fuego y dejamos enfriar un poco.
Vamos echando los huevos de uno en uno. Removemos bien después de cada huevo, tiene que estar bien integrado el primero antes de echar el segundo.
Ponemos a calentar abundante aceite, en mi caso de girasol. Con dos cucharas vamos echando bolitas no muy grandes. Se dan la vuelta solos.
Los sacamos sobre papel de cocina para escurrir un poco el aceite, los rebozamos en azúcar y los dejamos enfriar.
Montamos la nata con dos cucharadas de azúcar.
Para rellenarlos, tras probar de varias formas y con distintas boquillas, hay que hacerles un corte con la tijera y poner la nata dentro con una boquilla no muy grande.
Pesamos y preparamos todos los ingredientes.
Tamizamos la harina, la levadura y las sal. Reservamos.
Ponemos en un cazo a fuego medio la leche, el agua, la mantequilla, la ralladura, el azúcar y la mantequilla. Cuando empiece a hervir retiramos y añadimos la mezcla de harina y levadura, llevamos de nuevo al fuego y removemos muy bien hasta obtener una masa homogénea. Sacamos del fuego y dejamos enfriar un poco.
Vamos echando los huevos de uno en uno. Removemos bien después de cada huevo, tiene que estar bien integrado el primero antes de echar el segundo.
Ponemos a calentar abundante aceite, en mi caso de girasol. Con dos cucharas vamos echando bolitas no muy grandes. Se dan la vuelta solos.
Los sacamos sobre papel de cocina para escurrir un poco el aceite, los rebozamos en azúcar y los dejamos enfriar.
Montamos la nata con dos cucharadas de azúcar.
Para rellenarlos, tras probar de varias formas y con distintas boquillas, hay que hacerles un corte con la tijera y poner la nata dentro con una boquilla no muy grande.